
DENUNCIA CONTRA OAS Y ODEBRECHT
GONZALO ALEGRÍA ES IMPEDIDO DE PARTICIPAR EN EL DEBATE MUNICIPAL DE CANAL N
Gonzalo Alegría, como candidato a la Alcaldía de Lima Metropolitana en el 2010, denunció la sobrevaloración de precios de las obras realizadas por OAS y Odebrecht y fue extrañamente desaparecido de las encuestas y los medios de comunicación para que su honesta denuncia no prosperará.
En primer lugar, denunció la sobrevaloración en la construcción de la Vía Expresa Línea Amarilla que unió los distritos de El Agustino y El Callao. Gonzalo, mediante sus estudios económicos, demostró que la obra costaría 79 millones de dólares aprox. Y no 571 millones de dólares que la MML invirtió.
Aludió al contrato aprobado por Resolución Municipal 272, en el que se favorece a la multinacional OAS, pero que finalmente queda a cargo de una empresa con solo 2.900 soles de capital social, que -según sostuvo- no ofrecía garantía alguna.
De otro lado, advirtió la existencia de "desavenencias" en obras del puente del Ejército, considerando que 17 millones de dólares fueron gastados demás. Dijo que se encuentran involucradas personas "muy cercanas" a Lourdes Flores.
El Director del Diario El Comercio indicó que “no se le invitó” porque no superaba el 2% de la valla electoral, pero lo cierto es que antes de denunciar la corrupción, tenía en las encuestas un 5%. Fue a todas luces una acción ilegal y antidemocrática contra su candidatura.
DENUNCIA CONTRA OAS Y ODEBRECHT
Denuncia de despilfarro y malas prácticas en Editora Perú hecha por Gonzalo Alegría en Panorama
Gonzalo Alegría prefirió renunciar a su puesto de Gerente General en Editora Perú consorcio de empresas públicas del Grupo FONAFE (Diario Oficial El Peruano, Agencia de Noticias ANDINA e imprentas del estado Segraf), para no incurrir en actos de corrupción o despilfarro durante su gestión como Gerente General en plena pandemia (mesas de cristal a S/ 4 mil soles, televisores de S/ 7 mil soles, 800 bidones de agua, seguridad por S/ 1 millón de soles, gran cantidad de hojas bond y alquiler de impresoras y fotocopiadoras) cuando todo en ese tiempo se estaba realizando en trabajo remoto (aparentemente se querían continuar con normalidad las compras previas a su gestión porque había intereses ocultos pactados previamente (¿coimas?).
Criticó al Presidente del Directorio, Carlos Becerra, quien presuntamente habría también facturado al Ministerio de Salud como tercero, después de haber sido funcionario del MINSA, estando impedido por la Ley de Contrataciones con el Estado.
Gonzalo Alegría lo denunció ante el Órgano de Control Institucional, Presidencia de la República, FONAFE y la Secretaría de Integridad Pública de la PCM, pero no fue escuchado, por lo que tuvo que destapar dicho escándalo de corrupción en el programa Panorama de Panamericana Televisión de Rosana Cueva, como debe hacer todo ciudadano realmente honrado.

Gonzalo Alegría fue reemplazado en Editora Perú por un Gerente investigado por él por el despilfarro en el marco de los Juegos Panamericanos en Editora Perú
El 11 de febrero del 2021, el directorio cambió repentinamente al gerente general Gonzalo Alegría Varona y puso en su lugar a Gilbert Vallejos Ágreda, el gerente de Planeamiento y Desarrollo de la empresa estatal.
El nuevo gerente general Vallejos fue un funcionario a quien la Contraloría halló responsable del mal manejo del presupuesto para la cobertura periodística de los Juegos Panamericanos de 2019.
El informe de Contraloría fue enviado al gerente general Gonzalo Alegría y al presidente del directorio de Editora Perú, Carlos Becerra, el 3 de diciembre del 2020. Desde esa fecha, y según consagran los estatutos de Editora Perú, se dispuso una comisión de investigación interna que presidida por el gerente general (Gonzalo Alegría) aplicara las recomendaciones de Contraloría. En esa época, el gerente era el economista Gonzalo Alegría, quien inició la comisión y envió a Vallejos de vacaciones para que pudiera preparar su legítima defensa de los graves cargos que le imputaba Contraloría.
Pero al Presidente del Directorio Sr. Becerra no se le ocurrió mejor idea que destituir de inmediato a Alegría y encargar sus funciones a Vallejos, el mismo funcionario señalado por las irregularidades. Es decir, el acusado de corrupción (Vallejos) pasaba a ser juez y parte en el proceso que podía llevar a su eventual sanción con el apoyo del directorio. Por eso Alegría denunció en los medios estas gravísimas irregularidades (corrupción).
